LA VIOLENCIA MUNDIAL HA DESCENDIDO, PERO SEGUIMOS PENSANDO QUE NO ES ASÍ, ¿POR QUÉ?

Actualmente, la sociedad tiene una visión distorsionada de la verdadera realidad en referencia a la violencia; un hecho que influye en ello son los reportajes de los diferentes medios de comunicación. Hace unos años, en lo que entendemos como sociedades primitivas-recolectoras, los enfrentamientos propios de la comunidad o los asesinatos no se reportaban y no tenían difusión entre el resto de población, no viendo la violencia como algo que tenían frente a ellos, a pesar de que la tortura y la mutilación fuesen formas de castigo rutinarias, o incluso, que la pena de muerte fuese una sanción bastante común incluso para aquellos crímenes no violentos. 

En la actualidad, según los psicólogos cognitivos, cuanto más fácil sea recordar instancia específicas acerca de algo, más alta será la probabilidad de que te adhieras a ello. Las diferentes notas e imágenes que nos dejan los medios de comunicación tales como el periódico o la televisión son imágenes sangrientas, del escenario del crimen sin ningún retoque, que se grabarán en la memoria de los espectadores, más que al escuchar sobre la muerte de personas que mueren en su cama por su edad, como ocurría en épocas pasadas. 

La sociedad nos culpamos por el trato a los pueblos indígenas en la vida actual moderna y existe una falta de voluntad para reconocer que puede haber cosas buenas en la cultura occidental. Y por supuesto, nuestro cambio de estándares puede superar al cambio en comportamiento. Una razón por la que ha descendido la violencia, es que las personas se cansaron de la carnicería y la crueldad de la época, siendo este un proceso que parece continuar, pero si los estándares vigentes superan al comportamiento, las cosas siempre se verán mas brutales que lo que hubieran sido de acuerdo con estándares históricos.

Los porcentajes de homicidios, guerras, actos de terrorismo, abuso infantil y otras formas de violencia era mayores en períodos de tiempo pasados, pero la cobertura masiva de los hechos violentos tiende a enmascarar (las buenas noticias venden menos) que, por regla general, nuestras posibilidades de ser asaltados o asesinados han ido disminuyendo durante siglos. Incluso en el siglo XX, con sus dos guerras mundiales, las cifras han sido inferiores que en siglos anteriores. Y la segunda mitad del siglo XX ha sido testigo de una carencia de guerras entre Estados desarrollados y grandes potencias. Siendo este, solo uno de muchos motivos de la disminución de la violencia. Los porcentajes de homicidios en Europa se han dividido al menos por 30 desde la Edad Media: de aproximadamente 40 personas por cada cien mil al año en el siglo XIV a 1.3 al final del XX.

Por tanto, cabe afirmar que ha habido una disminución potencial de la violencia pero la sociedad solo nos centramos en ver el lado oscuro del ser humano.